El Museo de Geología de la Universidad de Moa constituye una institución docente y cultural, cuyo propósito social es la promoción de la conservación del patrimonio geológico minero, así como la cultura geoambiental. Entre sus colecciones, destacan los 12 ejemplares caídos o hallados fuera del territorio que son caracterizados en este trabajo. Ellos conforman la colección más grande y significativa de rocas extraterrestres de Cuba. Estos ejemplares históricos en su mayoría del siglo XIX fueron revisados en la literatura científica e investigada su procedencia, e incluyen meteoritos de diferentes clasificaciones: 1 meteorito acondrito marciano, 5 lititos, 3 siderolitos (2 pallasitos) y 3 meteoritos de hierro. Mantener estos meteoritos históricos correctamente exhibidos y en un entorno razonablemente controlado les brindará una mayor longevidad para el disfrute de futuras generaciones de entusiastas y geocientíficos.
The Museum of Geology of the University of Moa constitutes an educational and cultural institution, whose social purpose is the promotion and preservation of the geological heritage, as well as environmental culture. Within the collections, the 12 specimens investigated in this work stand out, as they were recovered from foreign locations and represent the largest and most significant collection of extraterrestrial rocks in Cuba. These historical specimens, mostly from the 19th century, were reviewed in the scientific literature and their provenance investigated, and include meteorites of different classifications: a martian meteorite, 5 stony meteorites, 3 stony-irons (2 pallasites) and 3 iron meteorites. Keeping these historic meteorites properly displayed and in a reasonably controlled environment will give them increased longevity so future generations of enthusiasts and geoscientists can enjoy them.
Preservar la historia de cada meteorito es tan importante como el estudio y la conservación física del ejemplar en sí, ya que las muestras y su información histórica deben estar disponibles para que cualquier investigador pueda replicar análisis, comparar o realizar nuevos estudios en todo momento. En ese sentido, los curadores y coleccionistas de meteoritos tienen el deber de preservar tanto lo intangible como lo tangible y colocar esta información para que esté accesible a la comunidad científica a través de catálogos en línea o publicaciones científicas.
En Cuba no se ha creado ninguna colección institucional de meteoritos cubanos hasta el momento, aunque en el Instituto de Geofísica y Astronomía se conservan fragmentos de algunos ejemplares. Unos pocos fragmentos del meteorito Viñales se encuentran en exhibición en el Museo “Tranquilino Sandalio de Noda” de Pinar del Río, y en la Casa del Visitante del Parque Nacional Viñales, o se han exhibido en el Museo Nacional de Historia Natural de La Habana y en el Planetario. Una revisión reciente del registro de meteoritos cubanos realizada por
Teniendo en cuenta la experiencia anterior, los autores de la presente investigación inspeccionaron los meteoritos históricos atesorados en el Museo de Geología de la Universidad de Moa, los cuales representan la colección más amplia de rocas extraterrestres en Cuba, incluyendo ejemplares de diferentes clasificaciones y de diversas localidades del planeta.
Las antiguas casillas y etiquetas sugieren que estos fueron originalmente preparados y vendidos por la Foote Mineral Company (Philadelphia), una compañía que se dedicó a vender meteoritos a principios de siglo XX. De ahí estos fueron adquiridos por la compañía Ward Natural Science Establishment, Inc. radicada en Nueva York, la cual era un proveedor de colecciones de rocas y minerales con fines educacionales, y desde ahí trasladados hacia Cuba.
En una de las tantas limpiezas de las colecciones del museo, uno de los autores (Luis A. Pérez) encontró las libretas con los registros históricos de la colección (
Muchos de estos materiales fueron comprados directamente a la Ward Natural Science Establishment, pero otros provienen de una colección privada de Carlos de la Torre que no se ha logrado ubicar. Cuando el museo se movió a Santiago de Cuba, llegaron a él otras muestras desde antiguos colegios eclesiásticos santiagueros y de los colegios internacionales El Cristo.
Aunque todos estos meteoritos fueron adquiridos en la etapa republicana, su caída o hallazgo se remonta en casi todos los casos al siglo XIX (excepto el meteorito Cañón del Diablo con una fecha de caída estimada en 50 000 años atrás). Desde hace algunas décadas estos meteoritos se utilizan para clases de geología y geoquímica en la Universidad de Moa, pero la colección no se ha divulgado lo suficiente y fuera de Cuba es casi desconocida.
La colección requiere de rescate de la información histórica asociada y catalogación, ya que las etiquetas originales han sufrido gran deterioro por el paso de los años.
La presente investigación tiene como objetivo poner a disposición de los investigadores un catálogo con la información concerniente a los meteoritos de la colección del Museo de Geología de la Universidad de Moa, a partir de la reidentificación en algunos casos, organización y catalogación de los ejemplares, como una contribución a la promoción de la conservación del patrimonio geológico.
En el desarrollo de la investigación se llevó a cabo la revisión de más de una veintena de rocas en la colección del Museo de Geología “Antonio Calvache Dorado” de la Universidad de Moa (M-ACD), así como diversos materiales procedentes de los fondos del museo, archivos de los autores, la base de datos de The Meteoritical Society, y varias colecciones de meteoritos en línea de museos internacionales. Otros materiales fueron consultados en la Biblioteca Digital Cubana de Geociencias (
Para el examen de los documentos se siguió el método histórico, usando un análisis intersubjetivo, comparativo y crítico de las fuentes. Para la terminología se siguieron las usadas por
La colección de meteoritos del M-ACD incluye 12 ejemplares que fue posible precisar su origen, identificación e información (
No todos los ejemplares se encuentran en un buen estado de preservación, algunos están muy fragmentados, otros parcialmente oxidados o totalmente recubiertos de una capa de óxido que ha afectado al 100% de la superficie, y en el caso de los hierros y pallasitos no están estabilizados.
Es recomendable que se tomen medidas de conservación de los ejemplares, incluida su colocación en bolsas herméticas para evitar su contacto con el aire, ya que la exposición actual se convierte en estos momentos en el máximo daño y fuente de futuros daños. Excepto el ejemplar M-ACD-012 (Cañón del Diablo) los demás ejemplares son de un tamaño reducido, lo cual permite su almacenamiento en condiciones adecuadas.
No
Meteorito
Fecha
Clasif.
Masa (g)
País
Fig.
M-ACD-001
Chassigny
1815
MAR
?
Francia
1A
M-ACD-002
Chantonnay
1812
L6
19
Francia
1B
M-ACD-003
Sao Julião de Moreira
1883
IIAB
10
Portugal
1C
M-ACD-004
L’Aigle
1803
L6
39
Francia
1D
M-ACD-005
Allegan
1899
H5
139
Michigan (USA)
1E
M-ACD-006
Admire
1881
PAL
?
Kansas (USA)
1F
M-ACD-007
Bluff
1878
L5
?
USA
2A
M-ACD-008
Bella Roca
1888
IIIB
?
México
2B
M-ACD-009
Crab Orchard
1887
Mes-A1
?
USA
2C
M-ACD-010
Ness County
1894
L6
?
USA
2D
M-ACD-011
Brenham
1882
PAL
?
Kansas (USA)
2E
M-ACD-012
Cañón del Diablo
~50 000
IAB-MG
?
Arizona (USA)
4
El Museo de Geología de la Universidad de Moa atesora 12 meteoritos caídos o hallados fuera de Cuba, los cuales son caracterizados en este trabajo, conformando la colección más grande y significativa de rocas extraterrestres de Cuba. En ese sentido, a partir de su revisión se puede arribar a las siguientes conclusiones:
la colección incluye diferentes tipos de meteoritos, 1 meteorito acondrito marciano, 5 lititos, 3 siderolitos y 3 meteoritos de hierro. por lo anterior, la colección merece mayor atención en cuanto a curación, preparación y estabilización de los ejemplares, creación de nuevas secciones delgadas, y ampliación de la misma con fragmentos o secciones de los meteoritos cubanos Viñales y Ramón de las Yaguas. el proceso de estabilización y la aplicación de técnicas de conservación y preparación ayudarán a prolongar la vida útil de los meteoritos de esta importante colección y permitirá mostrar la verdadera naturaleza de estos materiales al público, ejemplo: patrones de Widmanstätten en el caso de los hierros y cristales de olivino suspendidos en metal en el caso de los pallasitos.
Mantener estos meteoritos históricos correctamente exhibidos y en un entorno razonablemente controlado les brindará una mayor longevidad para el disfrute de futuras generaciones de entusiastas y geocientíficos.
Los autores desean agradecer al Dr. Manuel Iturralde-Vinent, quien aportó comentarios constructivos y sugerencias al manuscrito original. También se desea agradecer a loa árbitros anónimos por la revisión al documento.