Introducción
⌅Hoy en día, los planes de desarrollo del turismo en nuevos territorios, consideran necesario el estudio, entre otros aspectos de las características del área, en particular, los recursos de interés turístico (naturales, histórico-culturales, socio-económicos e infraestructurales existentes); las expectativas y preferencias de los visitantes potenciales y otros aspectos del marketing; la participación activa de los residentes locales y sus intereses específicos con respecto al turismo, incluyendo el conocimiento y atención de las comunidades autóctonas si existieren; finalmente, pero no menos importante, los aspectos del financiamiento económico de dichos planes para su ejecución.
Se comprende entonces que, la planificación turística está muy relacionada con el ordenamiento territorial del espacio, donde se desarrollarán las actividades turístico-recreativas. La organización de ese espacio, es un resultado importante a considerar en la atracción y motivación de los flujos de visitantes, en la proyección de la imagen comercial de los destinos turísticos, y también tiene importancia en la propia comercialización de los productos turísticos.
Sin embargo, en la fecha de 1975, en Cuba, no existían precedentes de estos estos estudios territoriales, ni conocimientos teórico-metodológicos, y mucho menos experiencias prácticas en su realización; Sin embargo, estos estudios eran necesarios, pues, aunque el turismo, -no constituía entonces, una actividad estatal priorizada-, comenzaban a establecerse algunos lineamientos políticos e intereses económicos nacionales dirigidos, por una parte, a potenciar el incipiente turismo nacional, y por otra, a propiciar la recuperación paulatina del turismo internacional existente en Cuba, en la década de los años 50 del pasado siglo.
El objetivo de esta crónica es: -Identificar los orígenes y describir los fundamentos de las investigaciones geográfico-paisajísticas aplicadas al desarrollo territorial del turismo y la recreación, realizadas en el periodo de 1975-1985. El principal resultado de estos trabajos fue la realización de planes territoriales de desarrollo turístico, con la aplicación de un enfoque geográfico integrador, y el empleo como unidades ambientales de estudio, los paisajes geográficos, su: identificación, delimitación, caracterización, distribución espacial y representación cartográfica, y basado en esta información, proponer una zonificación para la gestión y manejo turístico- recreativo del territorio.
Para ayudar a enfatizar la situación existente, en la segunda mitad de la década de los años 70, del pasado siglo en Cuba, respecto al conocimiento y desarrollo de las investigaciones relacionadas con los paisajes y el turismo, se consideró oportuno presentar unas síntesis de los antecedentes de estos dos aspectos.
Antecedentes históricos del estudio de los paisajes cubanos
⌅Los primeros estudios geográficos de los paisajes cubanos comienzan en el siglo XVIII y continuaron con mayor trascendencia en el siglo XIX, tienen un carácter descriptivo la exposición de las particularidades geográfico-paisajísticas, naturales y socio-económicas de los territorios estudiados, y sus representaciones cartográficas. Entre estos primeros intelectuales es necesario mencionar la significativa obra "Descripción de la Isla de Cuba" (1760) de Nicolás Joseph de RiveraRivera N. J. de. (1760). Descripción de la Isla de Cuba. Madrid. 112p..
En el siglo XIX se destaca el Barón Alejandro de Humboldt (1779- 1879) que publicó el "Ensayo Político sobre la Isla de Cuba" Humboldt, A. de. (1827). Ensayo político sobre la Isla de Cuba. Ed. Lacointe et Lasserre., en este trabajo al describir las condiciones naturales de Cuba, planteó la necesidad de analizar las relaciones existentes entre los diferentes componentes naturales y la sociedad. Otra de las figuras destacadas del siglo XIX, fue el geógrafo y cartógrafo Esteban Pichardo Tapia (1779-1879), entre sus obras se destacaron el "Itinerario General de la Isla de Cuba" y "Compendio de la Geografía de la Isla de CubaPichardo, E. (1854). Geografía de la Isla de Cuba. (Primera parte). La Habana.155 p.", ambas impresas en 1829. Un estudio monumental fue realizado por Ramón de la Sagra y Peris (1798- 1871) "Historia física, política y natural de la Isla de Cuba"De La Sagra, R. Historia física, política y natural de la Isla de Cuba. (14 tomos publicados entre 1842-1861). Paris en 14 tomos, publicados en París entre 1842-1861.
El destacado naturalista Felipe Poey y Aloy (1799-1891) entre sus numerosos trabajos publicó un "Compendio de la Geografía de la Isla de CubaPoey Aloy, F. (1836). Compendio de Geografía de la Isla de Cuba. Imprenta y Capitanía General. La Habana, Cuba." en 1836. A su vez, el geógrafo Miguel Rodríguez Ferrer (1815-1889) escribió la obra "Naturaleza y Civilización de la Grandiosa Isla de Cuba"Rodriguez-Ferrer, M. (1876). Naturaleza y civilización de la grandiosa Isla de Cuba. (Primera Parte Naturaleza). Madrid. 942p. .
Por sus contribuciones geográficas y cartográficas, especialmente por sus estudios referidos a las particularidades de los paisajes cubanos, es necesario señalar, entre otras ilustres personalidades a Salvador Massip Valdés (1891-1978), distinguido profesor, diplomático e investigador por sus numerosos trabajos realizados, en particular por su texto "Geografía Física de Cuba"Iñiguez, L. & Mateo J. M. (1980). Geografía Física de Cuba . Componentes naturales de los paisajes geográficos. La Habana. Editorial ENPEs. 252p. (1924), y la "Introducción a la Geografía Física de Cuba" (1951)Massip, S., & Ysalgué, S. E. (1942). Introducción a la Geografía de Cuba. La Habana. 258p., este libro escrito en colaboración con su esposa Sarah Ysalgué Ysalgué (1894-1989).
El cartógrafo Gerardo A. Canet Álvarez (1911-2011) autor del "Mapa de Paisajes de Cuba" (1945), con la colaboración y asesoría cartográfica del profesor estadounidense Edwin Raisz, publicaron el "Atlas de Cuba" (1949)Canet, G., & Raisz, E. (1949). Atlas de Cuba. Cambridge, Massachusetts. Harvard University Press. 70p donde se incluyó este valioso primer "Mapa de Paisajes de Cuba". El destacado intelectual Levi Marrero Artiles (1911-1995) geógrafo, profesor y periodista, publicó "Geografía de Cuba" (1950)Marrero, L. (1957) Geografia de Cuba. (Tercera edición). La Habana. Editorial Selecta. 668p. y una nueva versión ampliada en (1981) impresa en la ciudad de Miami. Su obra cumbre "Cuba. Economía y Sociedad", en una colección de 17 volúmenes, publicados entre 1972 y 1992 en Puerto Rico y España.
Por su parte, el pedagogo y profesor Pedro Cañas Abril (1902-1992) publicó una "Geografía de Cuba" (1975)Cañas, P., Quintero M., Olivera H. E. & Materno F. (1974) Geografía de Cuba (dos tomos). La Habana. Editorial Pueblo y Educación. 149p y 154p. pero su obra fundamental la constituyó la dirección del "Atlas Nacional de Cuba" (1970). El geógrafo, profesor y conocido geomorfólogo Manuel Acevedo publicó su importante estudio (1970) "Las regiones naturales de Cuba" Acevedo, M. (1970). Las regiones naturales de Cuba según su evolución histórico-geológica. Revista Tecnológica, VIII, 5, 35-39..
Un investigador que aborda en profundidad el conocimiento de los paisajes cubanos fue Antonio Núñez Jiménez (1923-1998) geógrafo, antropólogo y destacado espeleólogo. Autor de la "Geografía de Cuba" (1959)Núñez, A. (1959). Geografía de Cuba. (Segunda edición).La Habana. Editorial Lex. 664p.. Como notable explorador son destacados sus aportes al estudio espeleológico y antropológico de Cuba y el Caribe, su obra de mayor fue la colección "Cuba. La Naturaleza y el Hombre".
Otros dos destacados geógrafos, profesores de la Universidad de la Habana, Luisa Iñiguez Rojas y José Manuel Mateo Rodríguez, publicaron sus investigaciones en el libro "Geografía Física de Cuba. Componentes naturales de los paisajes geográficos" (1980). A su vez, Mateo publicó, Apuntes de la Geografía de los Paisajes (1984)Mateo, J. M. (1984) Apuntes de la Geografía de los Paisajes. La Habana. Editorial ENPEs. 470p..
Todos estos distinguidos profesores, investigadores e intelectuales, brevemente enumerados, a través de sus actividades docentes y publicaciones científicas, establecieron -de diferentes maneras y con el carácter epocal de sus investigaciones- los antecedentes históricos del conocimiento de los paisajes cubanos, en lo relativo epistemología, caracterización, explotación y transformación de los mismos.
A su vez, muchos de ellos, expresaron sus ideas -de una u otra forma, generales o más específicas- la necesidad de analizar integralmente, las complejas relaciones existentes, entre la naturaleza y sociedad cubana. Esta era la situación general del estado del arte, de los estudios de geográficos de los paisajes en Cuba, presente en el primer lustro de la década de los años 70, del pasado siglo XX.
Consideraciones sobre el turismo cubano hasta 1975
⌅El origen de los viajes de interés turístico en Cuba se remonta a los siglos XVIII y XIX, en la época colonial, dirigidos a los sitios con presencia de manantiales de aguas minero-medicinales y fangos curativos, alrededor de estos lugares se fueron creando pequeños pueblos, los cuales brindaban precarios servicios a los visitantes (Santamarina,1945Santamarina, V. (1945). El turismo. Industria Nacional. La Habana. Patronato del Balneario de San Diego de los Baños. 235p.); a finales de la primera mitad del siglo XX esa situación mejoró, en cierta medida, con la construcción de algunas instalaciones de alojamiento y la ejecución de vías de comunicación asfaltadas, a los principales balnearios: San Diego de los Baños y San Vicente, en la provincia de Pinar del Rio; San Miguel de los Baños en Villa Clara y San José del Lago, en la actual provincia de Sancti Spiritus, a este último, llegaban a la pequeña pista existente, avionetas con turistas desde la ciudad de Miami, en la década de los años 50 del pasado siglo. (Maribona, 1959Maribona, A. (1959). Turismo en Cuba. La Habana. Editorial Lex. 187 p.).
Las inversiones hoteleras y recreativas se concentraban en el área urbana de la capital. En el año 1950, el 66 % de las 6000 habitaciones hoteleras existentes se encontraban en La Habana, el resto estaban distribuidas en la península de Hicacos (playa de Varadero) y unas pocas dispersas en el resto del territorio nacional (Truslow, et al. 1951Truslow, F.A. et al. (1951). Report of Cuba Washington DC. International Bank for Reconstruction and Development in collaboration with the Governement of Cuba. 1005 p.).
Entre 1951-1958, se ejecutó un amplio proceso inversionista destinado al desarrollo del turismo internacional, se construyó la Vía Blanca, el túnel de la bahía de La Habana, y el puente sobre el cañón del rio Bacunayagua, estas tres infraestructuras con el propósito de unir por carretera la capital con las instalaciones de la playa de Varadero, principal zona de interés turístico en esa fecha.
A su vez, para el desarrollo de las actividades recreativas, se inauguraron el campo de golf de Colinas de Villareal y la marina Barlovento en la playa de Jaimanitas, ambos en el entorno de la ciudad de La Habana. Además, se construyeron e inauguraron grandes, modernos y confortables hoteles, con lujosos cabaret y casinos de juego, en las zonas residenciales de los barrios de El Vedado y Miramar, todo encaminado al incremento del turismo internacional, principalmente estadounidense.
Entre 1953 y 1956, visitaron a Cuba un promedio anual de 260 000 turistas. En 1957, se alcanzó la cifra más alta de arribos con 272 265 visitantes, de los cuales el 85 % eran estadounidenses. Ese año el turismo llegó a ocupar el segundo lugar, después del azúcar, en relación al total de exportaciones. (Banco Nacional de Cuba, 1958Banco Nacional de Cuba. (1958). Estadísticas Bancarias. La Habana.).
A partir de 1959, comienza a decrecer rápidamente el turismo extranjero, en particular el estadounidense por las diferencias políticas con los EEUU, en la práctica casi desaparece el turismo internacional; en 1962, solo visitaron Cuba 361 turistas. (González, 1980González, G. (1980). El desarrollo del turismo en Cuba.Revista Cubaturismo, 4 (1), 18-24)
En la década de 1970, se estable un plan nacional de inversiones turístico-recreativas dirigido al mejoramiento de diferentes zonas de playas, y a la construcción de hoteles en algunas capitales provinciales y otras ciudades importantes, con el objetivo de desarrollar el turismo nacional.
A partir de mediados de la década de los años 70 del siglo pasado, comienza una incipiente y lenta recuperación del turismo internacional, con la llegada de grupos de turistas canadienses y europeos, principalmente de la antigua URSS y otros países de la Europa Oriental.
En términos generales, esta era la situación existente en el turismo, en Cuba, en esos años. En lo que respecta a su planificación nacional y regional, se carecía de planes territoriales para su desarrollo. Se priorizaban las inversiones para mejorar aquellos lugares explotados con instalaciones de interés turístico, y se localizaban algunas nuevas instalaciones de alojamiento y recreación, en especial, en zonas de playas y montañas con atractivos naturales significativos.
Fundamentos teórico-metodológicos.
⌅Durante los años 1974 y 1975, realizaron coincidentes estancias de trabajo en Cuba, dos eminentes profesionales, los cuales llevaron a cabo diversas exploraciones, y variadas actividades docentes e investigativas, con independencia el uno del otro, sin llegar nunca a conocerse personalmente, cada uno desde sus propias especialidades y conocimientos realizaron importantes aportes científicos en lo geográfico y ecológico.
Desde los finales de 1974 y durante los dos años siguientes, realizó estancias de trabajó en Cuba, el Dr. G. M. Ignatiev, geógrafo, Profesor Titular de la Universidad de Moscú "M. Lomonosov" (1, ver al final del artículo). Invitado como colaborador académico por la Universidad de La Habana. Este destacado especialista impartió, por primera vez en el país, un curso de postgrado sobre el tema de la Geografía de los Paisajes. Este curso con una duración de varias semanas, incluía aspectos teóricos y prácticos (Ignatiev, 1974Ignatiev, G. M. (1974) Conferencias sobre Geografía de los Paisajes.(Manuscrito). La Habana. Escuela de Geografia. Universidad de la Habana. ). Fue organizado por su aventajado discípulo, -en aquella fecha aspirante al título de Doctor en Ciencias Geográficas-, el profesor José M. Mateo Rodríguez, (1946-2019), el cual participó, de manera directa, en el desarrollo de los estudios geográfico-paisajísticos en Cuba, en años posteriores y publicó "Apuntes de la Geografía de los Paisajes" (1984)Mateo, J. M. (1984) Apuntes de la Geografía de los Paisajes. La Habana. Editorial ENPEs. 470p..
Las enseñanzas impartidas por el Dr. Ignatiev sentaron los fundamentos epistemológicos y metodológicos de los estudios geográficos de los paisajes y su cartografía, para los fines del ordenamiento territorial, en diferentes sectores económicos: agricultura, minería, obras marítimas, forestal, turismo, urbanización y otros. El origen, identificación, composición y delimitación de las unidades de paisajes geográficos -llamados complejos territoriales-, resultados de la integración de los distintos componentes naturales y antrópicos. Fueron temas explicados con maestría por el profesor en sus conferencias y trabajos de campo realizados.
El otro investigador y académico que, en esos mismos años 1974-1975, realizó estancias prolongadas en Cuba, fue el Dr. S. Kenton R. Miller, destacado ecólogo estadounidense (2, ver al final del artículo), con una amplia experiencia internacional de trabajo en la conservación y manejo de áreas protegidas, el cual como especialista de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), vino a asesorar las actividades de desarrollo e investigación de los Instituto de Nacional de Desarrollo y Aprovechamiento Forestal (INDAF) y del Instituto Nacional de la Industria Turística (INIT). Entre los temas abordados en sus conferencias y expediciones de campo, se refirió a la importancia de los estudios espaciales del patrimonio natural para la planificación y recreación (Miller, 1974Miller, K. R. (1974) Manejo y desarrollo integral de las áreas naturales y culturales protegidas. La Habana. Proyecto PNUD/CUB 69/503. Informe Técnico. 100p.), los cuales con un amplio sentido holístico, establecieron los principios ecológicos rectores para la zonificación funcional turístico-recreativa de los territorios estudiados, especialmente en la áreas naturales protegidas.
Basados en los fundamentos teórico y prácticos, aportados por estos dos eminentes especialistas, los estudios realizados a partir de 1975, relacionados con la planificación territorial del turismo, utilizaron los paisajes geográficos como unidades ambientales básicas, como sustento teórico-metodológico de estos trabajos. En la literatura geográfica el término paisajes se asocia a los complejos naturales, los cuales poseen como unidades ambientales, su propia estructura geográfica y composición, y tienen como ventaja, el ser posible su delimitación espacial con relativa facilidad.
En la identificación y diferenciación de los distintos paisajes se utilizaron como factores diferenciadores, para establecer las categorías taxonómicas superiores de los tipos de paisajes: las características litológicas y geomorfológicas (en su estructura y composición, por lo general perceptibles al observador) y el componente agua.
En la identificación y diferenciación de las categorías inferiores de los tipos de paisajes se emplearon como factores diferenciadores: los suelos, la vegetación, las pendientes y las actividades antrópicas existentes en el área.
En la práctica, la tarea principal a resolver en las categorías de paisajes, -como unidades ambientales-, es la objetividad de los contornos o límites entre los diferentes paisajes existentes, la resolución de esta tarea se fundamenta en el estudio de la composición y estructura de los componentes naturales y de la transformación antrópica de los mismos. Los mapas resultados de estos estudios, por lo general, son complejos con una extensa leyenda cartográfica, la cual resume una amplia información.
A continuación, se muestran dos ejemplos de leyendas, correspondientes a trabajos realizados en la década de los años setenta del siglo pasado, donde se aprecia la aplicación los paisajes como unidades ambientales, y la descripción que se realiza de los componentes naturales y de la actividad antrópica.
Leyenda de mapa de paisajes de Cayo Largo del Sur. Escala 1: 50 000 (Salinas Er. et al. 1978Salinas, Er., et al. (1978). Cayo Largo del Sur. Condiciones naturales y explotación turística. La Habana. Centro de Investigaciones Turísticas. Instituto Nacional del Turismo. 138 p.)
Lagunas permanentes y estacionales, pantanos salobres con manglares y costa de mangle sobre arenas y sectores de barra litoral de arenisca con arbustos y palmas dispersas.
Superficie del sistema de barras de arenisca (arenas oolíticas litificadas) de 2 a 4 m de altura, con suelos húmico-arenosos predominantes, con afloramientos rocosos de arenisca, y vegetación de árboles aislados, arbustos y bosques de palmas de hasta 4 m de altura.
Playas arenosas (arenas oolíticas).
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Sub comarca. Playa arenosa ancha 10-20m
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Sub comarca. Playa arenosa estrecha de 2 a 10 m con thallaceas, sargazos y otras plantas marinas en su fondo.
Leyenda del mapa de paisajes del Parque Nacional Valle de Viñales. Escala 1:50 000. (Salinas, Er., Castro J. R. y Iñiguez, L., 1979Salinas, Er., Castro-Fernández J. R. & Iñiguez L. (1979). Viñales. Evaluación estética de los paisajes para su aprovechamiento turístico. La Habana. Centro de Investigaciones Turísticas. Instituto Nacional del Turismo. ).
Sierras cársicas. Montañas bajas (350-400m), sobre calizas masivas estratificadas, pendiente fuertes y paredones. Vegetación original xerófila sobre suelos esqueléticos.
Mogotes. Elevaciones cársicas aisladas de forma cupular, sobre calizas masivas. Vegetación original xerófila sobre suelos esqueléticos.
Valles y depresiones cársicas. Depresiones cársico-erosivas, cubiertas en su fondo por depósitos aluviales sobre calizas masivas estratificadas, Vegetación original de montes semideciduos sobre suelos ferralíticos rojos intensamente cultivados (tabaco, viandas y pastos).
Alturas de pizarras. Alturas bajas (200-250m) erosivo-denudativas, fuertemente diseccionadas sobre esquistos, pizarras y areniscas. Vegetación original de pinares y encinares sobre suelos ferralíticos rojos lixiviados poco profundos.
Llanura de pizarra. Llanuras altas y medias (50-190m) erosivo-denudativas, ligeramente diseccionadas sobre pizarras y esquistos, vegetación original de pinares y encinares, sobre suelos ferralítico rojos lixiviados medianamente profundos.
Llanura fluvial. Llanura alta (140-170m) fluvio-denudativa, ligeramente ondulada, sobre depósitos recientes. Vegetación original de pinares y encinares, sobre suelos aluviales con cultivos de viandas, hortalizas y pastos.
Acerca de los trabajos realizados entre 1975-1985
⌅A partir de estos fundamentos geográficos y ecológicos, aportados por estos dos eminentes especialistas; se comenzaron los primeros estudios para aplicar a la planificación territorial del desarrollo turístico en Cuba, el enfoque geográfico- paisajístico: Estos trabajos se iniciaron en 1975, en el entonces Departamento de Áreas Naturales del Instituto Nacional de la Industria Turística (INIT), su principal resultado radicaba en realizar un análisis integral, multidisciplinario de los diversos componentes naturales (bióticos y abióticos) y las transformaciones antrópicas existentes en el territorio, los cuales anteriormente, se realizaban y estudiaban aisladamente; y a partir de estos análisis y resultados realizar propuestas sobre su uso y conservación de esos territorios de interés turístico.
La primera investigación de este tipo con intereses turístico, -en la cual se llevó a la práctica las explicaciones dadas en sus conferencias por los Doctores Ignatiev y Miller-, se ejecutó con carácter experimental, en la zona litoral comprendida entre la playa Jibacoa y la Ensenada de Bacunayagua en 1975. El título de ese trabajo fue: "Reserva Turística Integral Jibacoa - Bacunayagua", en el mismo se realizó un mapa de paisajes a escala 1:50 000 y sobre esta base cartográfica, se realizó la propuesta de zonificación funcional turística a igual escala. Una década después, en este sector costero, de la actual provincia de Mayabaque, se desarrolló el campismo popular con la construcción de numerosas infraestructuras de alojamiento y recreativas, que continúan prestando servicios en la actualidad.
A pesar de las limitaciones derivadas de la inexperiencia de los geógrafos y demás especialistas participantes en este estudio geográfico integral, los resultados iniciales aportados por este trabajo para la planificación y desarrollo del turismo, motivaron a la dirección del Instituto Nacional de la Industria Turística (INIT), asignarle a este grupo de trabajo, la tarea de ejecutar una evaluación con fines turísticos de Cayo Sabinal - isla de 335 km2 situada en el extremo oriental del grupo insular Jardines del Rey - , los objetivos principales de este nueva investigación eran inventariar y evaluar los recursos turísticos existentes y establecer una propuesta para su desarrollo turístico. Existían en aquella fecha, intereses inversionistas extranjeros para ese cayo, los cuales finalmente nunca se materializaron.
En marzo de 1976, se concluyó e imprimió el informe de investigación titulado: "Cayo Sabinal. Evaluación de las condiciones naturales para el turismo". Entre sus resultados, vale señalar, la realización del mapa de tipos de paisajes y el de zonificación funcional para el manejo turístico, a escala 1:50000, su realización se fundamentó en el empleo de las fotos aéreas disponibles en aquella fecha y en numerosos recorridos de campo.
A partir de las experiencias teórico-prácticas de estas dos investigaciones geográficas, y con la colaboración multidisciplinaria de distintos especialistas, (Mironienko, 1976Mironienko, N. S. (1976). Conferencias sobre Geografía del Turismo (Manuscrito). La Habana. Escuela de Geografia. Universidad de la Habana.) se elaboró, un procedimiento de trabajo para ejecutar el inventario y la valoración de los recursos naturales y antrópicos de interés turístico, que tuvo por título: "etodología para la evaluación de los recursos turísticos" (1976).
En julio de 1977, en el recién fundado Instituto Nacional de Turismo (INTUR), se creó una nueva estructura científica independiente, el Centro de Investigaciones Turísticas (CIT), que se fundamentó en el personal de este joven equipo de trabajo. El trabajo investigativo del CIT se inició con el estudio geográfico integral de Cayo Largo del Sur (1977), -isla de 28 km2 ubicada al Sur de Cuba, en el extremo oriental del Grupo Insular de Los Canarreos-, con el propósito de explotar para el turismo las excelentes playas existentes en este Cayo.
En su litoral sur occidental, se habían construido, entre los años 1959-1962, un hotel de dos plantas, con una capacidad de 59 habitaciones, más 24 cabañas, ubicadas 12 al Este y 12 al Oeste del hotel, además de un muelle, una pista de aviación, una marina, almacenes, albergues para los trabajadores y otras instalaciones de apoyo al turismo. La puesta en explotación de todas estas obras, terminadas en su mayor parte, no se realizó debido a la llamada Crisis de Octubre de 1962, conocida también como la Crisis de los Misiles, con esta investigación se pretendía establecer -a 15 años de estos sucesos- una propuesta para el rescate y explotación turística de ese territorio.
En enero de 1978, se concluyó esa investigación, después de realizar diversas expediciones por mar y tierra al Cayo. El informe final llevaba por título: "Cayo Largo del Sur. Condiciones naturales y explotación turística"Salinas, Er., et al. (1978). Cayo Largo del Sur. Condiciones naturales y explotación turística. La Habana. Centro de Investigaciones Turísticas. Instituto Nacional del Turismo. 138 p.. En dicho estudio se realizó un inventario detallado y evaluación cualitativa de los recursos turísticos naturales, histórico-culturales y de las características de sus paisajes, se consideraron también los cambios y modificaciones introducidos por el hombre en esos paisajes. En la actualidad Cayo Largo del Sur constituye uno de los más importantes destinos turísticos cubanos de playa.
Con el objetivo de perfeccionar el procedimiento de trabajo de recolección, valoración y representación cartográfica de los recursos de interés turístico, se confeccionó un nuevo documento metodológico, con el título: "Guía Metodológica para el Inventario de los Recursos Turísticos", que incluía como anexo un grupo de planillas para facilitar el inventario y valoración cualitativa de los recursos. Esta guía sirvió de base para la realización de otras investigaciones, se pueden destacar entre otras áreas naturales protegidas estudiadas, las zonas montañosas de: " Soroa" y "Topes de Collantes" (1978), El "Parque Nacional Valle de Viñales" (1979), -declarado posteriormente por la UNESCO. Paisaje Cultural de la Humanidad- y la "Playa de Santa Lucia" (1979) en la provincia de Camagüey, en todos estos territorios dichos trabajos sirvieron de fundamento para el desarrollo del turismo y las medidas encaminadas a la conservación de estos territorios.
Además, se realizaron otros trabajos, con objetivos especiales de estudio de sus paisajes, entre los que se pueden señalar: "Topes de Collantes. Caracterización de sus paisajes para su uso turístico" (1978) y "Valle de Viñales. Evaluación estética de los paisajes para su aprovechamiento turístico" (1979). En años posteriores, se pueden señalar, entre los más significativos: "San Diego de los Baños. Turismo de Salud. Condiciones naturales para su aprovechamiento turístico" (1981) en la provincia de Pinar del Rio; "Baracoa. Evaluación de sus recursos turísticos" (1981) en la provincia de Guantánamo; "Estudios turísticos de los sectores litorales Gibara - Banes" y "Mayari - Moa" (1982) ambos en la provincia de Holguín.
Finalmente, cerraron esa década de investigaciones de los paisajes geográficos aplicadas a la planificación territorial del turismo, los estudios del "Parque Nacional Valle de Viñales - Cayo Levisa. Evaluación turística y estrategia de desarrollo" (1983) donde se abordaba el aprovechamiento y conservación de estas dos áreas protegidas, con paisajes muy diferentes, uno rural y el otro litoral, y el " Parque Nacional Ciénaga de Zapata, Evaluación turística y estrategia de desarrollo" (1985), estos dos últimos trabajos con un sentido estratégico más comercial. Una tesis de Doctorado en Ciencias Geográficas resumió, de cierta manera, las experiencias alcanzadas en estos estudios territoriales, que llevaba por título: "Fundamentos geográfico- paisajísticos para la organización del turismo en Cuba" (1986).
Discusión de los resultados
⌅Las propuestas de desarrollo en los distintos territorios, -considerados a priori, como espacios de posible desarrollos turísticos por sus favorables condiciones naturales y características antrópicas-, se elaboraron sobre la base y combinación de dos enfoques de investigación: el físico-geográfico complejo (estudio de la composición y estructura de los componentes naturales) y el enfoque ecológico (más funcional).
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Los conocimientos teórico-prácticos aportados por la geografía de los paisajes, aplicados a la clasificación tipológica, caracterización de los paisajes y su representación cartográfica.
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Los lineamientos ecológicos generales establecidos para la categorización de las zonas funcionales en las áreas naturales protegidas, para su uso y conservación por el turismo y la recreación.
En términos generales, el empleo de los paisajes como unidades ambientales agilizó los trabajos aplicados a la planificación territorial, -en especial aquellos dirigidos al desarrollo turístico y conservación ambiental de áreas naturales protegidas-, al favorecer la diferenciación y caracterización geográfica y cartografía de los espacios estudiados.
Además, permitió proponer, sobre la base de los estudios de los paisajes, una zonificación funcional de manejo turístico del territorio, la cual es una herramienta de gran utilidad para: 1- estimar los usos públicos turístico-recreativos, más apropiados para el aprovechamiento y conservación de una cierta área; 2- facilitar la toma de decisiones sobre un territorio, al establecer una relación espacial entre los tipos de paisajes existentes y su manejo turístico- recreativo y viceversa.
Estos criterios metodológicos y epistemológicos, de caracterización y evaluación de los paisajes, aplicados especialmente, a la planificación territorial de las áreas naturales, fueron empleados con posterioridad (1987-1989), en las investigaciones multidisciplinarias coordinadas y ejecutadas, por la Academia de Ciencias de Cuba, el entonces Instituto Nacional de Geodesia y Cartografía (ICGC) y otras instituciones, a lo largo de la costa norte de Cuba.
Conclusiones
⌅Las experiencias investigativas de los estudios geográficos integrales aplicados al turismo en áreas naturales se iniciaron en Cuba, en 1975, en el Instituto Nacional de la Industria Turística y continuaron, en 1979, en el Instituto Nacional de Turismo hasta 1984-1985 aproximadamente, estas instituciones dirigieron, organizaron, ejecutaron y financiaron estos trabajos.
Este enfoque geográfico-paisajístico, basado en los paisajes como unidades ambientales, fue empleado posteriormente, en la planificación territorial de diferentes sectores de la economía nacional, por el entonces Instituto de Planificación Física. Se aplicó también en estudios ambientales y conservación de la naturaleza por el Ministerio de Ciencias, Tecnología y Medio Ambiente y otras instituciones nacionales y provinciales, debido a la favorable información que aporta para la planificación territorial. Actualmente, continúa empleándose, con las necesarias adecuaciones propias de los avances científico- técnicos alcanzados en estas últimas décadas, entre ellas, el empleo de las imágenes satelitales de alta resolución y los Sistemas de Información Geográfica.
La trascendencia y continuidad, hasta nuestros días, de la teoría y la práctica de los estudios geográfico paisajísticos en Cuba, ha sido posible, gracias al aporte que, a través de la docencia e investigaciones realizadas por la Facultad de Geografía de la Universidad de La Habana, entre otras instituciones.